Más Que Recetas Gastroliteratura: La Nueva Moda Que Mete Los Libros En La Cocina A Través De Grandes Historias
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Laurie Colwin, que falleció antes de cumplir los 50 años, reconoce que su interés desmedido por la
gastronomía viene dado porque aprendió en la asignatura de Introducción a la Antropología que «la cultura no la conforman exclusivamente las Grandes Obras de la Humanidad, sino también los elementos cotidianos, como el alimento y la manera que se prepara».
Con esta premisa, y acompañados de numerosas anécdotas sociales y profesionales, Colwin comparte sus pensamientos sobre la ensalada de patata «no hay ensalada de patata mala», la dificultad de
hacer pan, que ella misma sufrió aunque posteriormente logró salir victoriosa, las instrucciones culinarias necesarias para dar una fiesta o sus fracasos, malos momentos y «cataclismos» gastronómicos, que también los tuvo.
Publicado originalmente en 1988, este exquisito libro repleto de buenos consejos,
recetas y entrañables momentos, es una creación inspiradora que, muy probablemente, terminará metiéndote en la cocina.
El país donde florece el limonero. Helene Attlee.
Con el subtítulo de La historia de Italia y sus cítricos,
El país donde florece el limonero (Acantilado) es el fruto de la profunda investigación que, durante años, llevó a cabo Helene Attlee tras diversos viajes a Italia y la impresión que le causó, hace más de tres décadas, la visión de los limoneros.
«Nunca he olvidado aquellos
árboles ni la manera que transformaban el paisaje a su alrededor; un paisaje que resultaba intensamente extraño a mi mirada genuinamente inglesa«, confiesa en el arranque del libro.
Experta en jardines italianos, sobre los que ha escrito varios libros, Attlee mantuvo vivo su amor a primera vista combinando los jardines con su interés por los limoneros y «empecé a examinar los cítricos de cada
huerto que visitaba como si fueran cuadros en una exposición«.
Y a preocuparse por su historia, desde la relación de los Médicis por esta fruta, y sus inicios ornamentales, a las propiedades
dietéticas de la naranja sanguina (cultivada en Sicilia), pasando por el poder de la mafia en esta industria, la importancia de la cidra en las tradiciones judías, la historia de la bergamota o el aroma del azahar.
Acompañada de algunas recetas en las que los cítricos son protagonistas, este ensayo sobre las frutas que representan el 63% de la producción frutícola de Italia es un viaje por la Historia, la cocina y la agricultura del país transalpino. Un meticuloso retrato de unas
frutas, y de un país que, año tras año, sorprenden y conquistan a quienes los descubren.
Los misterios de la taberna Kamogawa. Hishashi Kashiwai.
La ficción llega a esta recopilación de la mano de un licenciado en odontología, Hishashi Kashiwai, que tras abrir una clínica dental se lanzó a escribir libros sobre su ciudad Kioto y
Los misterios de la taberna Kamogawa (Salamandra). Un éxito que ha dado lugar a una serie de ocho novelas, la primera de las cuales se ha traducido a veinte idiomas, y ha sido adaptada a la televisión por la NHK TV.
Los protagonistas de su saga son el expolicía Nagare Kamogawa y su hija Koishi. Juntos regentan una taberna en la que sirven algunos de los platos más conocidos de la
cocina nipona y donde también ofrecen un servicio de investigación gastronómica a los clientes que lo solicitan. Porque «el condimento de la nostalgia» es muy poderoso y desean recuperar los sabores relacionados con los recuerdos felices.
Para conseguirlo padre e hija investigan el pasado de su cliente, dónde comió el plato que tanto añoran, quién lo cocinó y dónde pudo comprar los ingredientes o qué
sabor recuerdan cuando piensan en él. Una mezcla entre trabajo detectivesco y sabiduría culinaria que nos regala tiernas historias, con la cocina japonesa se revelándose como un experiencia transformadora que marca a los clientes de Nagare y Koishi.
Cocina de verano. Elizabeth David.
Aunque es más recetario que cualquiera de sus antecesores en esta lista,
Cocina de verano (Debate) está aquí porque su autora se dirige con inusitada franqueza al lector y porque, para estar escrito en 1955, es un manual revolucionario y moderno.
Elizabeth David reconoce en la introducción que escribió el libro para ofrecer recetas «haciendo hincapié en dos aspectos de la cocina que cada vez se presta menos atención: la idoneidad de ciertos alimentos para determinadas épocas del año y el placer de
comer (...) los productos de mejor calidad, los más abundantes y los más baratos«.
Como le sucedió a Julia Child, quien dijo «tus platos no serán los mismos» una vez se conoce a David, fue un viaje a
Francia lo que provocó que la británica se interesase por la cocina. Buena parte de su creación literaria se centró en la gastronomía del país galo e Italia, y publicó su primer libro en 1950. Sus investigaciones y trabajos hicieron de ella una voz influyente en la cocina inglesa.
Una gastronomía que, como no podía ser de otra manera, David no duda en criticar, señalando la omnipresencia de la salvia en la cocina de su país como culpable de «la aversión a las
hierbas aromáticas« de los ingleses. Tampoco se queda corta a la hora de desvelar que muchos restaurantes incluyen »despropósitos »en su carta fuera de temporada confiando en la »ignorancia de sus clientes«.
Las frases del día:
“De la educación de la mujer depende la civilización y la cultura de los pueblos” - Carmen de Burgos, escritora
“Ignoramos cuál es nuestra verdadera estatura hasta que nos ponemos de pie” - Emily Dickinson, poeta
“No hay barrera, cerradura ni cerrojo que puedas imponer a la libertad de mi mente” - Virginia Wolf, escritora
“Lo mejor del olvido es el recuerdo” - Gloria Fuertes, poeta
23 de agosto-22 de septiembre
Virgo
Como elemento de Tierra, los Virgo son perfeccionistas hasta el extremo. Para ellos, los detalles cuentan y mucho. Pero, además, tienen la paciencia suficiente para que lo que tiene que estar bien, lo esté pase lo que pase. Su capacidad crítica y su mente analítica se encarga de que así sea. Ver más
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