La necesidad de buscar una salida a la saturación de los servicios de Urgencias de los centros hospitalarios y de reducir las listas de espera, ha llevado a la Consejería de Salud a facultar a las enfermeras a que comuniquen los resultados de las analíticas y de renovar las recetas de medicamentos. Estas atribuciones se llevan a cabo desde hace días mediante la aplicación Salud Responde, tal y como denunciaron desde el sindicato UGT que señaló que "esas nuevas funciones generan problemas a los usuarios que ven que no responde a las expectativas creadas".
Según la denuncia a la que desde esa aplicación "a los andaluces les han puesto en la consulta para la enfermera tres nuevas opciones que son, renovar medicación, resultado de pruebas analíticas y consulta o duda". Según reconocen los profesionales sanitarios "las dos primeras generan situaciones muy problemáticas, ya que la enfermera no tiene opción, ni de recetar lo que quiera el paciente, ni tampoco el interpretar resultado de pruebas analíticas", mientras que la tercera "es un cajón desastre que hace rebosar las consultas de muchas cuestiones ajenas a lo asistencial".
Desde UGT se reconoce que "las enfermeras están cansadas y hastiadas de haberse convertido en el rebosadero del caos en el que se ha convertido la Atención Primaria a costa de su esfuerzo y dedicación y sin ninguna mejora laboral. Están más que cualificadas y son un pilar fundamental en nuestro sistema sanitario público, pero de ahí a convertirse en una chica para todo es una cuestión absolutamente intolerable".
Desde la Consejería de Salud, quisieron matizar a este periódico que "la oferta de cita de profesionales del tipo “consulta telefónica” está disponible por canales externos (ClicSalud, App Salud Andalucia y Salud Responde) desde principios de la pandemia por Covid, por lo que no es algo nuevo, llevamos tres años ,y al elegir ese tipo de consulta, ofrece distintas opciones dependiendo del tipo de profesional del que se trate".
En concreto, "para la consulta enfermera estas opciones son: renovar medicación u otros productos (para la prescripción de productos sanitarios y prescripción colaborativa de tratamientos crónicos que han sido marcados por el facultativo como susceptibles de dicha prescripción colaborativa); resultado de pruebas analíticas (en el contexto de seguimiento programado y rutinario de pacientes con enfermedades crónicas sin signos ni síntomas de inestabilidad); y consulta o duda (para resolver dudas o consultas de los pacientes en relación a sus necesidades de cuidados, sus planes de cuidados o sus autocuidados)".
En el mismo sentido, el Sindicato de Enfermería, SATSE, en Andalucía ha realizado un estudio en el que ha constatado la gran pérdida de poder adquisitivo que ha sufrido el sueldo base de las enfermeras y fisioterapeutas andaluces con respecto al Salario Mínimo Interprofesional (SMI). Durante el periodo 2011-2015 "estos profesionales soportan una drástica reducción salarial, pues se produce un recorte tanto del salario como de las pagas extraordinarias, que llevaron a que a finales del año 2015 la diferencia salarial con el SMI fuera tan solo de 318,84 euros, un 29,64%".
La última etapa, explica SATSE, "es la correspondiente a los años desde el 2016 hasta 2023, donde se produce un incremento importante del SMI, pero que, sin embargo, la escasa inversión sanitaria, acentúa aún más la pérdida de poder adquisitivo asumida por los profesionales, de forma que se ha ido acortando enormemente la diferencia entre la base salarial de las enfermeras y los fisioterapeutas". "Solo en el año 2019, con la subida del 22,3% del Salario Mínimo Interprofesional, frente al incremento del 2,5" de los profesionales sanitarios, se redujo de forma drástica el diferencial hasta el 8,12%, lo cual situaba la diferencia entre la base salarial de estos sanitarios y el SMI en 92,9 euros".
Este estudio de la evolución de las retribuciones elaborado por el sindicato, demuestra que desde el año 2007 y hasta la actualidad, el sueldo base de los profesionales sanitarios no ha conseguido acumular más de un 13,29 por ciento de subida salarial, mientras que el SMI ha hecho un 67,2%, con un IPC acumulado a lo largo de estos años de un 30,9%".
Concluye SATSE, que "las enfermeras y fisioterapeutas andaluces vienen sufriendo en los últimos años un insuficiente reconocimiento salarial en su nómina de cada mes, lo que, a su vez, se traduce en que no se está poniendo en valor las difíciles condiciones laborales de estos profesionales, los cuales trabajan con una permanente sobrecarga laboral y con contratos temporales y precarios en muchos casos".